Por: Patricia Sierra
Como abogada he aprendido que el verdadero poder del Derecho no esta solo en lo que prohíbe si no en lo que protege y si algo merece protección es la Dignidad Humana.
Pero ahí una Pregunta que con el Tiempo se ha vuelto Urgente y es: Desde cuando un ser humano dejó de ser suficiente para tener derechos?.
Hoy no vengo a hablar solo de leyes o estadísticas. Vengo a hablar de humanidad.
De personas que cruzan fronteras con una maleta llena de miedo, esperanza y dignidad.
Y vengo a decirlo con fuerza, con verdad y con respeto:
Migrar no es un delito. Migrar es un derecho! Y sobre todo, migrar es un acto profundamente humano.
I.¿Qué dice la historia y el derecho internacional?
En 1948, tras los horrores de la Segunda Guerra Mundial, el mundo grito : “ Nunca Mas” decidió crear un marco común que protegiera la dignidad humana. Así nació la Declaración Universal de los Derechos Humanos, adoptada por las Naciones Unidas.
Entre sus principios fundamentales, están:
📜 Artículo 13:
-Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia
-Toda persona tiene derecho a salir de su país y regresar a él. Principio de la Movilidad.
📜 Artículo 14
-En caso de persecución, toda persona tiene derecho a buscar asilo y a disfrutar de él.
Estos no son ideales abstractos. Son normas con peso legal y moral.
II. ¿Y qué dice la Constitución de los Estados Unidos?
En medio del debate migratorio, a menudo olvidamos una verdad legal contundente:
La Constitución de los Estados Unidos protege a toda persona, sin importar su estatus migratorio.
📜 La Quinta y la Decima Cuarta Enmienda establecen:
“Ninguna persona será privada de la vida, la libertad o la propiedad, sin el debido proceso legal.”
Subrayo: “persona”, no “ciudadano”, no “residente”. Persona!
Esto incluye a solicitantes de asilo, a migrantes sin documentos, a quienes llegan huyendo de la violencia.
El debido proceso legal es un derecho garantizado para todos, y negarlo es negar el alma democrática de esta nación.
III. La política ha olvidado que migrar es un Derecho.
Hoy se criminaliza a quienes migran. Se les etiqueta como amenazas, como invasores, como ilegales.
Pero no existe tal cosa como una persona ilegal. Nadie puede ser ilegal por existir.
Migrar, cuando es un acto de supervivencia, de esperanza, de amor por la vida y la libertad, no es un crimen. Es un derecho. Y es, ante todo, un acto profundamente humano y profundamente Americano.
IV. Migrar no es nuevo: es parte de nuestra historia.
La migración es tan antigua como la humanidad. Y hoy, continúa impulsada por las mismas causas
-Persecución
-Pobreza
-Conflicto
-Crisis climática
-Violencia de género
-Falta de oportunidades
Cada migrante lleva consigo una historia. Una herida. Una esperanza. Una Conquista.
V. Estados Unidos: una nación construida por INMIGRANTES.
Este país no existiría sin inmigrantes. Ellos lo han moldeado con su ingenio, su dolor y su valentía.
Figuras destacadas incluyen:
-Albert Einstein (Alemania), refugiado judío que revolucionó la ciencia.
-Sergey Brin (URSS), cofundador de Google, llegado como refugiado.
-Gloria Estefan (Cuba), voz y símbolo de la diáspora latina.
-Elon Musk (Sudáfrica), emprendedor que redefinió la tecnología.
-Ilhan Omar (Somalia), refugiada y congresista, voz de los marginados.
-Salma Hayek (México), actriz y activista por la justicia social.
-Hamdi Ulukaya (Turquía), fundador de Chobani, empleador de refugiados.
Y entre todas estas historias, quiero destacar una:
La historia de Madeleine Albright : Nacida en Checoslovaquia, Madeleine Albright llegó a Estados Unidos con su familia huyendo del nazismo y, más tarde, del comunismo.
Su historia es la de una niña refugiada que aprendió a hablar inglés a través de los cuentos, y que con el tiempo se convirtió en una figura histórica.
Fue la primera mujer en ocupar el cargo de Secretaria de Estado de EE.UU., el más alto en política exterior. Pero no solo rompió un techo de cristal: lo hizo representando a este país en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Desde esas plataformas globales, defendió los derechos humanos, la diplomacia multilateral y la Paz, en un momento histórico marcado por conflictos en los Balcanes, genocidios y migraciones masivas.
Su vida entera fue una afirmación poderosa de que una refugiada no solo puede sobrevivir: puede liderar.
Y nunca olvidaremos su frase más valiente, dirigida especialmente a las mujeres del mundo. A la Sororidad entre mujeres.
“There is a special place in hell for women who don’t help other women.”
“Hay un lugar especial en el infierno para las mujeres que no ayudan a otras mujeres.”
Madeleine Albright es la prueba de que los migrantes no son una amenaza: son una fuerza transformadora!
Pero más allá de los nombres famosos, debemos rendir homenaje a quienes sostienen silenciosamente la columna vertebral de este país:
-Los campesinos inmigrantes, que siembran, cosechan y alimentan a millones.
-Los obreros, que levantan rascacielos, caminos y hogares con sus manos callosas.
-Las mujeres inmigrantes, que limpian, cuidan, cocinan, y que, aún en la invisibilidad, sostienen generaciones.
Ellos también construyen país.
VI. Migrar es un derecho, y es un acto profundamente humano
Hoy, más que nunca, cuando el miedo es usado como política y la ignorancia como argumento, debemos levantar la voz por quienes no pueden hacerlo.
Migrar es un derecho. Migrar es un acto profundamente humano.
Proteger a los migrantes no es una causa de izquierda o derecha, es una causa de humanidad, es una causa de justicia, es una causa de memoria. Y si realmente creemos en la dignidad humana y la protección a los Derechos Humanos, entonces migrar no debe castigarse, No debe criminalizarse, sino garantizarse!.
“El mayor privilegio del ser humano no es tener un lugar donde nacer… sino tener un mundo donde pueda vivir con dignidad”.